Memoria
de tesorería

Es para mi un honor dirigirme a todos los colegiados este año ante los retos y oportunidades que se abren para la farmacia comunitaria y para todos los farmacéuticos, en general.

En la Asamblea de junio se aprobó la liquidación del ejercicio 2021, donde se detallaron los ingresos y gastos del período. Por otro lado, en la Asamblea de diciembre se aprobaron los presupuestos para 2023 y, por tanto, las políticas colegiales que marcan los objetivos para el año y su financiación, en un período que significa una vuelta a la normalidad para todos nosotros.

Las cuentas del Colegio y los presupuestos fueron aprobados por la inmensa mayoría de los presentes en ambas asambleas.

En el ejercicio 2022 se ha logrado una contención del gasto por debajo de la inflación. Todo un reto teniendo en cuenta la importante repercusión que ha tenido esta circunstancia sobre los servicios y suministros.

Los gastos institucionales se han visto afectados por un doble motivo. Por una parte, hemos sufrido el aumento de los costes y, por otra, han aumentado el número de reuniones y actividades. Esta previsión razonable se reflejó en el presupuesto de 2023 que, como hemos dicho, se aprobó en el mes diciembre.

La optimización de los costes colegiales ha sido una prioridad en la política de actuación de esta Junta de Gobierno. En este año de subidas continúas de los suministros y servicios, hemos tenido que extremar las revisiones de precios, renegociando, una y otra vez, y, si ha sido necesario, cambiando de proveedor.

La sensibilidad con todos los colegiados también se ha materializado al mantenerse las cuotas fijas en los mismos valores relativos de años anteriores. Cabe reseñar que, si las deflactásemos, nos encontraríamos con una reducción real y objetiva.

El criterio de esta Junta es claro: que los colegiados paguen la menor cuota posible y que, aquella que pagan las oficinas de farmacia de manera solidaria, se vaya reduciendo en el tiempo.

El Colegio da un apoyo generalizado, dentro de sus diversas modalidades de actuación. Nuestra sensibilidad se remarca con claridad en el acompañamiento solidario a jubilados y aquellos compañeros sin ejercicio. La colaboración en la búsqueda de empleo es algo altamente valorado y por eso disponemos de una bolsa de trabajo muy eficiente.

También se prioriza la cobertura para aquellos que ejercen en la oficina de farmacia, así como quienes lo hacen en ortopedia, análisis clínicos, óptica, en la administración estatal o autonómica, hospitales, etc.

Afortunadamente, dejada atrás la pandemia, y viendo que los protocolos recomendados por el Colegio fueron muy eficaces, se ha conseguido crear una cultura donde la farmacia comunitaria se ha involucrado en la atención primaria, lo que nos ha llevado a ser uno de los servicios mas valorados.

Gracias al esfuerzo diario de cobertura a la población se ha logrado dar un nivel de servicio sanitario de excelencia, como así lo han reconocido las autoridades, los diversos organismos nacionales e internacionales, y la sociedad en su conjunto.

Los hitos de 2022 que debemos destacar en atención a los colegiados han tenido varias líneas de actividad. Por su importancia, hacemos hincapié en la simplificación de los procedimientos. Estamos fomentando el uso de nuestra plataforma digital Gestiona que permitirá, cada vez más, el acercamiento del Colegio a cada farmacéutico.

Los nuevos sistemas digitales para la formación, y otros usos, son temas relevantes en los que seguimos trabajando como en la plataforma formativa Moodle, etc.

Se puede hacer un resumen claro de las mejoras en los diversos ámbitos de la actuación profesional, gestionados de manera integrada y coordinada con los servicios públicos. Nos hemos centrado en programas sanitarios en los que colaboramos con otros colectivos, asociaciones de pacientes, y en la búsqueda de nuevos y mejores canales de comunicación con los prescriptores.

El sello de identidad de esta Junta es el esfuerzo continuo por buscar una integración real de la farmacia comunitaria en el sistema de salud.

Se están desarrollando programas de formación en todas las áreas de conocimiento de los farmacéuticos, bajo una perspectiva de calidad y capacitación.

Se busca la máxima especialización en los diversos temas, con una perspectiva diferenciadora para lograr una actualización eficiente.

Nuestro vínculo con el Servicio Murciano de Salud es muy estrecho y positivo. Son muchos los grupos de trabajo que tenemos con el SMS, en diferentes ámbitos como la prescripción excepcional, nueva hoja de cupón precinto, comunicación prescriptor-farmacéutico, etc.

Lo mas importante es la voluntad decidida de las partes a innovar y avanzar en beneficio del usuario de los servicios sanitarios públicos de la Región de Murcia.

El concierto con el SMS, firmado abril de 2022, goza de una excelente salud, ya que se diseñaron determinados aspectos que permiten adaptarnos a situaciones excepcionales.

La oficina de farmacia tiene un marco regulatorio que produce un agravio comparativo con respecto a otros sectores, como por ejemplo, los descuentos establecidos en los Reales Decretos, los cuales ahogan a las finanzas de las farmacias. Estos tenían carácter transitorio cuando se establecieron en el año 2000 y todavía siguen vigentes, y sin actualizarse durante años.

Las continuas bajadas de los precios de los medicamentos conllevan, además de desabastecimiento de producto, unas pérdidas continuadas para la oficina de farmacia y el correspondiente perjuicio para el paciente.

Son diversos los acontecimientos de carácter económico que afectan negativamente a los farmacéuticos en el ejercicio diario de sus tareas.

Por otra parte, me gustaría destacar la gestión en la tramitación de las recetas dispensadas por la oficinas de farmacia. La facturación de recetas a las entidades correspondientes se realiza a través de una empresa externa que factura a las O.F.

El Colegio da servicios complementarios a la receta, por lo que cobra una prestación sujeta a IVA. La función más importante que realiza el COFRM en esta tramitación es de revisión de determinadas recetas de cuantía importante, así como la presentación y cobro de las facturas a las entidades.

Por último me gustaría hablar de dos aspectos de carácter técnico de Tesorería.

Las inspecciones de estos ejercicios pasado terminaron y se encuentran recurridas, teniendo informes que dan la razón al Colegio porque ha tenido un correcto proceder en la aplicación de la facturación de servicios sujetos y no exentos de IVA, y las cuotas variables sujetas, pero exentas de IVA, en clara controversia con la AEAT. Esperamos que el resultado sea favorable el COFRM.

Por otro lado, 2022 arrancó con un telefonazo del tesorero de la Comunidad Autónoma, por aquel entonces, para indicarnos que el pago de las recetas del mes previo se vería demorado hasta el día 30, tras un año de puntualidad cronométrica en las liquidaciones -casi, más bien, anticipación-.

Esto suponía un incumplimiento del Concierto de Prestación Farmacéutica, entonces vigente, que establecía que el pago debería producirse el día 20.

Sucedía que para la correcta gestión de los recursos de la CARM, resultaba vital pasar la factura de las recetas al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) —pagadero el día 30—, pues la Comunidad Autónoma había dejado de percibir las dotaciones de las que, con motivo de la pandemia, se había venido beneficiando.

No había tutía, o mejor dicho, no había dinero. El pago de enero nunca se produciría antes del día 30.

En ese mismo instante tuvimos que ponernos a trabajar en dos líneas: conseguir financiación para adelantar el pago al día 20 mediante factoring; y hacer entender a la Administración que las oficinas de farmacia de la Región no son equiparables a otros proveedores, por lo cual, lo ocurrido debía ser excepcional.

Un retraso de 10 días tiene fuertes implicaciones, y en algunos casos, inasumibles.

La financiación fue cuestión de días. Cuatro jornadas pasaron desde la llamada telefónica hasta que nos encontrábamos firmando en notaría un factoring de 40 millones de euros con Caixabank.

Este factoring conllevó unos gastos e intereses que reclamaríamos a la CARM, hasta que, finalmente, se produjo su pago.

Conseguir que la Administración entendiera que las oficinas de farmacia de la Región no son equiparables a otros proveedores fue muy complicado.

Además, ésto vino a ocurrir en un momento en el que ya nos encontrábamos trabajando con la Administración en la redacción del nuevo concierto de prestación, que habría de aprobarse pocos meses después.

Hemos afrontado muchos retos en 2022 y el futuro se muestra prometedor gracias a las respuestas ágiles que hemos dado en pro de la farmacia y de todos los colegiados, porque no puede ser de otra manera.

El Colegio trabaja sin límites por la farmacia comunitaria y por cada colegiado, porque la luz verde nunca se apaga.